El priismo jalisciense, encabezado por Laura Haro Ramírez, ha fijado una postura enérgica en defensa de su líder nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, y ha lanzado una contundente denuncia contra lo que califica como el "régimen destructor de Morena", al que tilda de "narco político" y "cártel". La crítica se extendió también a Movimiento Ciudadano, señalado como cómplice de este gobierno.
Laura Haro Ramírez, en rueda de prensa, calificó al Partido Revolucionario Institucional (PRI) como la única "verdadera oposición" en el país, acusando a Morena de ser un grupo de "criminales, cínicos y sinvergüenzas" responsables de la violencia que ha convertido a México en un "baño de sangre".
La dirigente estatal del partido tricolor, señaló que el país se encuentra en una situación crítica, con más del 70% del territorio intransitable y con una economía estancada que ha abandonado al campo, a las mujeres y a los jóvenes emprendedores.
La líder priista denunció la existencia del "peligrosísimo cártel de Macuspana", una organización que, según ella, ha causado un "daño brutal" al país y se ha consolidado como un partido político de muerte. Esta red de complicidades, afirmó, opera desde Palacio Nacional bajo el liderazgo de Andrés Manuel López Obrador, convirtiendo al Estado en protector y "empleador de una bola de delincuentes".
Acusó al senador Adán Augusto López de ser el operador de dicho cártel y de orquestar el grupo delictivo "La Barredora".
También exigió que el "narco senador" solicite licencia para ser investigado. De igual forma, señaló a los hijos de AMLO (Andy, Bobby y José Ramón) como "lo más corrupto que le ha sucedido al país", a quienes responsabilizó de ser los principales operadores del "huachicol fiscal", un fraude que asciende a 500 mil millones de pesos. Además, mencionó investigaciones abiertas por el Departamento de Justicia de Estados Unidos contra otros morenistas por vínculos criminales, como al gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, al de Sinaloa, Rubén Rocha y a la de Baja California, Marina del Pilar, por citar algunos.
La persecución contra Alejandro Moreno Cárdenas, aseguró, se debe a sus denuncias valientes ante la Fiscalía General de la República (FGR) y organismos internacionales, en las que ha señalado a México como una "vergüenza internacional".
En respuesta, Morena retiró la presidencia de la Comisión de Marina a Moreno Cárdenas para entregársela al "impresentable" Carlos Lomelí Bolaños. A pesar de esto, la Haro Ramírez reafirmó que el PRI no retrocederá en su lucha.
Laura Haro Ramírez citó una encuesta digital que, según ella, muestra que el 93% de los participantes cree que Morena es un "narco partido", mientras que el 81% está "muy decepcionado" del partido por haber traicionado, robado y mentido.
La denuncia se amplió hacia el partido naranja de Movimiento Ciudadano (MC), partido al que Haro Ramírez señaló como cómplice de Morena.
Acusó a MC de tener una relación de "complicidad, mucho cariño y sometimiento" con el partido en el poder, y de "hacer el trabajo sucio a Morena". Como prueba de esta colaboración, denunció que el coordinador de los senadores de MC, Clemente Castañeda, firmó el acuerdo para retirarle la Comisión de Marina a Alejandro Moreno.
La priista manifestó que no ha escuchado a Castañeda, a la presidenta de MC en Jalisco, Mirza Flores, ni a ningún legislador del partido naranja, pronunciarse o denunciar a estos "narco políticos", y lanzó un llamado de "SOS, se buscan a Movimiento Ciudadano" para que demuestren si realmente son oposición.
Finalmente, Laura Haro Ramírez hizo un llamado a la unidad de toda la oposición, la sociedad civil, la academia y las cúpulas empresariales para defender la democracia en el país, advirtiendo que México está a punto de perderla ante la instauración de una dictadura impuesta por el "régimen pernicioso, perverso, corrupto y criminal de Morena", concluyó.
