Maullidos Urbanos
Gato de Barrio
No se puede decir que la actual crisis por la falta de agua en varios estados del norte del país, en el caso muy particular de Nuevo León, fue un hecho sorpresivo ya que existieron señales ignoradas por las autoridades tanto estatales como federales y ahora, como una posible alternativa, el presidente Andrés Manuel López Obrador solicitó a fabricantes de cerveza y refresco detener momentáneamente la producción de sus plantas a fin de ceder el agua de sus pozos para el consumo doméstico.
Esta petición se respalda en el ’Acuerdo de inicio de emergencia por ocurrencia de sequía severa, extrema o excepcional en cuencas para el año 2022’, publicada en el Diario Oficial de la Federación, a fin de implementar medidas para garantizar el abasto de agua para la población en lugares con condiciones de sequía severa, extrema o excepcional. Por lo tanto, se establece que titulares de las concesiones de aguas, en particular para los usos industrial y agrícola, cedan a terceros el líquido de manera provisional en caso de ser necesario.
Aunque Nuevo León es la segunda productora nacional de cerveza con el 11% –la cual encabeza Zacatecas con 24.1% y el tercer sitio es para Coahuila con el 11.5%–, también es sede desde la multinacional Heineken, 40 plantas artesanales y de Arca Continental, segunda mayor embotelladora de Coca Cola, y de GEPP, de PepsiCo.
Pero el uso del agua no es solo como materia prima de las bebidas –según The World Wildlife Fund, para cada litro de cerveza se usan cerca 155 litros de su elaboración–, también se requiere lavar retornables y para por producir materias primas y envases desechables.
Aunque hasta el momento no existe respuesta de parte de los industriales y de manera informal han expresado su intención de colaborar, no será sencillo que ellos decidan aportar agua. Se debe agregar que de acuerdo con la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), ya se padece desabasto de cerveza, siendo el verano cuando más se consume, situaciones que podría tardar en regularizarse hasta dentro de tres meses.
El problema para López Obrador es que pese a sus intentos de acercamiento con los empresarios en general, regularmente los ha considerados no como adversarios sino como enemigos, por lo cual podrían acceder a su petición presionados más por cuestiones políticas que como una respuesta a una situación social. Sin embargo, aunque respalden la petición, será necesario alcanzar soluciones más profundas y de largo plazo para poder satisfacer el abasto de agua requerido por los afectados.
