Con la llegada de la temporada de calor, es común que aumente la presencia de insectos como mosquitos, moscas, cucarachas y hormigas dentro de los hogares, lo que puede representar molestias e incluso riesgos para la salud.
Aunque existen productos comerciales para controlar estos insectos, muchas personas buscan opciones más naturales y amigables con el entorno. Una alternativa efectiva es el uso de plantas aromáticas que, además de ser fáciles de cultivar, actúan como repelentes naturales gracias a los compuestos que liberan.
En este artículo, le comparto qué insectos son más comunes durante esta época de calor, los riesgos que representan, y cómo algunas plantas que se adaptan fácilmente al clima local pueden ser aliadas efectivas para mantener un ambiente más saludable y libre de plagas.
Durante los meses más cálidos es frecuente la presencia de diversos insectos dentro de los hogares.
A continuación, se describen algunos de los más comunes y las problemáticas que pueden causar:
Mosquitos: Además de ser molestos por sus picaduras, pueden transmitir enfermedades como dengue, chikungunya y zika. Algunas personas y animales también pueden presentar reacciones alérgicas en la piel (World Mosquito Program, 2025).
Moscas domésticas: Funcionan como vectores de bacterias y otros agentes patógenos que contaminan alimentos y superficies, lo que incrementa el riesgo de enfermedades gastrointestinales (CENAPRED, 2023).
Hormigas: Ciertas especies invaden despensas y superficies en busca de alimento. Algunas pueden causar reacciones alérgicas por sus mordeduras, tanto en personas como en mascotas (Cranshaw, 2017).
Cucarachas: Representan un riesgo para la salud al transportar bacterias, virus y alérgenos, los cuales pueden agravar afecciones respiratorias, especialmente en niños (National Pesticide Information Center, 2025).
Existen plantas que, además de embellecer los espacios, ayudan a repeler insectos gracias a la liberación de compuestos como aceites esenciales y terpenos. Estas especies se adaptan bien a diversos climas y pueden colocarse en interiores o exteriores del hogar. A continuación, te presentamos algunos ejemplos.
Citronella (Cymbopogon nardus): Posee un aroma cítrico, por lo que es uno de los repelentes naturales más conocidos contra mosquitos.
Lavanda (Lavandula angustifolia): Su aroma agradable para las personas resulta repelente para mosquitos, polillas y moscas.
Albahca (Ocimum basilicum): Además de los usos culinarios, ayuda como repelente de mosquitos y mosca doméstica.
Menta (Mentha spicata): Por su aroma mentolado, evita la entrada de hormigas, pulgones y mosquitos.
Romero (Rosmarinus officinalis): Excelente repelente contra mosquitos y algunos tipos de moscas, además de su resistencia al calor y sequía.
Caléndula (Calendula officinalis): Funciona como repelente de mosquitos y nematodos en el suelo, además embellece los jardines por su colorida floración.
Geranio perfumado (Pelargonium graveolens): Produce aceites con efecto repelente principalmente contra mosquitos.
Recomendaciones para su cuidado
Ubícalas en zonas estratégicas como ventanas, entradas o terrazas.
Asegúrate de que reciban luz solar suficiente (especialmente lavanda y romero).
Controla el riego para evitar exceso de humedad que favorezca otras plagas.
Una solución estética, ecológica y saludable
Muchas plantas producen compuestos volátiles como citronelol, linalol, mentol o timol, que interfieren con los receptores sensoriales de los insectos, dificultando que localicen zonas de reproducción o alimento.
Incorporar plantas repelentes en tu hogar no solo aporta un toque decorativo, sino que también contribuye a un ambiente más limpio, saludable y sostenible.
*El Dr. Jaime Alcalá es Profesor-Investigador del Departamento de Biotecnológicas y Ambientales, en el Laboratorio de Zoología de la Universidad Autónoma de Guadalajara.