Ratzinger fue el 265.° papa de la Iglesia católica y séptimo soberano de la Ciudad del Vaticano.
Resultó elegido el 19 de abril de 2005 tras el fallecimiento de Juan Pablo II.
El 28 de febrero de 2013 renunció al papado asumiendo el título de «papa emérito», con la intención de dedicarse «a la oración y al retiro espiritual».
En enero de este año, diversos medios de comunicación revelaron un informe en el que se acusó a Ratzinger de inacción en 4 casos de abuso sexual cuando era arzobispo de Múnich.
Ese reporte publicado, entregado por una firma legal alemana lo incrimina directamente.
De acuerdo con el documento, el abuso sexual continuó durante los años que Ratzinger estuvo en el cargo y los sacerdotes acusados de estos crímenes continuaron en actividad en distintas parroquias y puestos adscritos a la Iglesia católica alemana.