Tezoyuca, Mex._ la explotación de la mina ’El Tezoyo o Ocupulco’ se ha convertido en un grave problema que afecta a más de 80 viviendas; mientras que para René Martínez Moncayo se ha convertido en una mina de oro y esta se ha convertido en un dolor de cabeza para los alcaldes de Tezoyuca y Chiautla.
Los vecinos del lugar quienes se encuentran del lado de Chiautla en zona ejidal y del lado de Tezoyuca en pequeña propiedad, ambos con asentamientos irregulares, exigen a sus alcaldes la clausura de la mina, por el daño a más de 60 viviendas y contaminación ambiental, además impedir la circulación de tráileres que transportan el material pétreo por calles del municipio.
Denunciaron que en la extracción de material pétreo, usan explosivos para pulverizar la roca, al parecer de manera clandestina ya que en vos de los denunciantes dijeron ’La Sedena al acudir a la mina confirmó que no hay permisos de uso de explosivos’.
Remembraron que en el año 2007, el manejo inadecuado de explosivos causó daños al tanque elevado del agua potable con fisuras al igual que cerca de 80 viviendas, en paredes, columnas, techos, vidrios rotos, y crear pánico en la población.
Cabe señalar que la explotación de la mina ha sido por décadas, en un perímetro de 42 hectáreas, y el supuesto dueño de la concesión, René Martínez Moncayo ha dañado las viviendas con un constante peligro de derrumbe al quedar cerca de los desfiladeros.
Recordaron que el pasado 27 de abril, vecinos de la Concepción y Tezoyuca, bloquearon la calle Venustiano Carranza en protesta por la circulación de tráileres que dañaron el asfalto de las vialidades; sin embargo ante el poder que dice tener René Martínez Moncayo a los vecinos que se oponen al funcionamiento de la mina son amenazados por los responsables de la mina, e incluso balearon una vivienda para que dejen de protestar.
Finalmente señalaron que Carlos Ramos Rodríguez, alcalde de Tezoyuca, y su homologo Ángel Melo han sido indiferentes al riesgo que corren las familias y las afectaciones a vialidades de sus municipios.
