Tultitlán, México.- Otra vez es éste Municipio Libre que ve cómo su infancia va quedando reducida a nada ante propios y extraños al escenificar ahora en la colonia San Pablo de las Salinas el abandono de un feto de 4- 5 meses de gestación un feto de 4- 5 meses de gestación, según el parte de médico legista del Ministerio Público del Centro de Justicia de Cuautitlán Izcalli, cuyo hallazgo lo realizó un recolector al hacer la clasificación y separación de los residuos sólidos de la zona antes referida. Quien recordó que dicha bolsa la recibió de una jóven mujer menor de edad, dando reporte de los hechos constitutivos de un probable delito a la policía municipal. Hasta donde llevó a los guardianes del orden en el domicilio de la menor, la fué requerida por la policía y conducida al Centro de Justicia referido.
Ahora bien, si no hay datos oficiales por el momento, si se desprende que existen Leyes contemplan como delito el abandono de personas de acuerdo al Código Penal Federal el cuál, acompaña a éste reporte informativo, que en su articulado menciona precisamente desde los artículos 335 a 343 inclusive sobre el particular. Mientras que la cifra de Padres Ausentes en México, del registro de 1995 fue de 31%de hogares mexicanos que carecía de una figura paterna, ése mismo informe revela que un 7.5% fueron abandonados por la madre en número de 38, 126 niños abandonados ésto en 2008. Por su parte, aldeas infantiles.org.mx reveló en qué en ése lapso 29,000 niños, niñas y adolescentes fueron abandonados en orfanatos o albergues.
Si bien es cierto también que en lo que va del año no hay cifras oficiales todavía, hasta que concluya el 2025, y que también el artículo 335 y 336 del Código Penal Federal prevé entre 1 a 5 años de prisión a quien abandone a un descendiente incapaz de cuidarse a si mismo, lo atenuante del caso es que, como es menor de edad la infractora, podría ser no absuelta, pero si ser atendida psicológicamente para que cobre conciencia del hecho inhumano y carente de amor del hecho de éste reporte.
También como corresponsable quedan los padres, la pareja y el entorno social de la menor infractora, lo que también revela que la nuestra es una sociedad deshumanizada, desorientada y decadente.