Mientras muchas y muchos aspirantes al Poder Judicial del Estado de México apuestan por el escritorio y el protocolo, Erika Icela Castillo se ha volcado al territorio. En un solo fin de semana, la candidata a la Presidencia del Poder Judicial recorrió varios municipios y localidades de la entidad, llevando consigo su mensaje de una justicia cercana, humana y sin discriminación.
Timilpan, Atlacomulco, San Felipe del Progreso, Mexicaltzingo, Chapultepec, La Marquesa y San Lorenzo Huehuetitlán fueron testigos de su incansable andar, escuchando de primera mano las inquietudes, demandas y sueños de ciudadanas y ciudadanos que por años han sentido lejana a la justicia. ’Cada paso me recuerda por qué esta lucha importa. Porque no se puede transformar el Poder Judicial si no se conoce el rostro de la injusticia y la esperanza que habita en cada rincón del Estado de México’, expresó Erika Icela durante uno de sus encuentros comunitarios.
Con megáfono en mano y el corazón firme, la candidata insiste en que la justicia no puede seguir siendo un privilegio para unos cuantos, sino un derecho que escuche, que abrace y que actúe sin distinciones. Su presencia en comunidades marginadas y alejadas del centro judicial es muestra de un compromiso real con la transformación del sistema.
Erika Icela Castillo, con 28 años de experiencia judicial y una trayectoria marcada por romper techos de cristal, continúa su campaña con la certeza de que una nueva
justicia es posible, una donde el territorio no se mira desde el escritorio, sino se camina con empatía y decisión.
