La Opinión de Mario García
Mario García/ TEN
El ciclo termina nuevamente de la misma forma. Sergio Armando Chávez Dávalos culmina el suyo como político, como Alcalde le falta un poquito de aire.
Sin embargo, deja en la orfandad política a chavistas fundadores y a los que se agregaron en el camino luego de una o varias orfandades previas.
En el transcurso de veinticinco años, casi continuos de ocupar espacios públicos derivados del apoyo tonalteca, y después de revisar los distintos caminos que Chávez siguió, no encontramos quien pudiera continuar, ya no digo con su ’legado’ porque entraríamos en debates sin sentido, pero si la estructura política que tanto le han comprado en el PRI, MC y Morena.
Comenzamos analizando personajes cercanos a su trayectoria, masculinos y femeninos, y no encontramos alguien con el peso político para mantener la estructura chavista, mucho menos para darle forma a un proyecto de cara al 2027.
-Si alguien tiene otros datos y se anima a compartirlos, se valorará su aportación-.
A la sombra de Chávez no crece ni el zacate, ahí están sus diputadas suplentes, solo como ejemplo: Guadalupe Villaseñor y Melina Gallegos, que más allá del pantallazo no han encontrado un segundo; Enrique Guzmán, súper Secretario General en su gobierno priísta con Sergio Chávez, luego Regidor emecista de la mano del mismo Chávez, y ahora nuevamente edil, y coordinador de su partido en el municipio tonalteca, más gris que las canas.
Celia Gauna Ruiz de León, actual Secretaria General, causa de conflictos internos añejos y nuevos, de Tlaquepaque y con esa actitud aplasta pobres que la caracteriza, la mencionamos solo para gastar un poco de tinta.
En las sinuosidades de su camino, Chávez acordó con grupos y personas según requería para ganar elecciones, una muestra de ello es su gabinete, enredado exclusivamente en la nómina, hoy no mencionaré particularidades administrativas para enfocarme en lo político exclusivamente, porque considero que el futuro político de Tonalá está a punto de ingresar al fuego del tiempo.
Sin actores políticos consistentes y de cara al 2027 la estructura chavista enfrenta el reto de la subsistencia política, porque además de la inercia, el desgaste natural, una coyuntura adversa y un escenario de fracturas morenistas, la lucha intestina llega a las secciones territoriales.
La "estrategia" de la sorpresa, tal vez improvisación, que le ha dado resultados en el pasado, ahora se volverá en contra. A pregunta expresa de varios actores políticos morenistas en activo del municipio sobre el proyecto político para el 2027, todos responden lo mismo: hay que esperar la línea de Sergio.
Eso aclara que no hay proyecto o si existiera no lo conocen ni los miembros de su equipo.
Tal vez por eso se ven algunos de sus funcionarios activos con la diputada Arizmendi, como es el caso del director de Promoción Económica Alberto Villa Jáuregui, y el ’trapecista’ Carlos Rodríguez Burgara, solo como ejemplo.
O los acercamientos de Timoteo Campechano con ’la Regidor’ Juncal Solano, además de los muchos "prudentes" que están poniendo un pie fuera de la olla y se reúnen en secreto más allá del morenismo activo.
El tiempo no perdona ni espera, y llegó el momento dónde cerrará con tres candados la puerta negra de las opciones políticas a los actores que aspiran, a lo que sea en un par de años.
Un gran reto inmediato para los aspirantes, hombres o mujeres, porque si su jefe no decide tendrán que decidir por sí mismos en el brevísimo tiempo que la coyuntura permite, o dejarse arrastrar por la inercia, nada favorable a los políticos tonaltecas.
La oposición no canta mal las rancheras, aunque el tiempo le favorece circunstancialmente, al menos a Movimiento Ciudadano, pero se le cerrarán los caminos en unos cuantos meses para mostrar un rostro aceptable al pueblo Tonalteca, que ya no encuentra el sol por ningún lado.
Panistas y priístas, al igual que los morenistas tonaltecas, se jugarán la subsistencia, o el olvido con una línea tan delgada de tiempo que difícilmente encontrarán.
Vaya pues, si Chávez Dávalos no encuentra cartas para jugar en el 2027 a la brevedad, su propia oposición interna, en el mejor de los casos correrá despavorida en busca de cobijo, si la encontrara en su propio partido no tiene garantía de nada, y si el refugio fuera la oposición naranja seguramente la calma después de su prolongado gobierno se esfumaría. Al tiempo, como diría el que se fue.
