Alebrijes en Cuadratines
Adrian Chavarria
Seguramente usted ha conocido o leído acerca de las diferentes generaciones, como la Baby Boomers, ’X’, ’Y’ o Millennials, ’Z’ o Centennials, y la Alfa, las cuales corresponden a las varias etapas de la sociedad contemporáneas y su desarrollo social y tecnológico. Ahora, de acuerdo con especialistas, a partir de este año iniciará la que se conocerá como Generación Beta.
Primero, se debe puntualizar que cada generación tiene características propias que las hacen diferentes entre sí. Por ejemplo, los llamados Millennials se sienten decepcionados por cómo las anteriores han manejado problemas como las crisis del clima o de la vivienda. Incluso, los años de inicio y fin de cada una de ellas varían según los investigadores consultados, sin omitir que en cada país pueden convivir simultáneamente entre cuatro o cinco generaciones.
Debe recordarse que las generaciones conocidas se clasifican de acuerdo al lapso de nacimiento. Así la ’Silent’ comprende a los nacidos entre 1928 y 1946; la de los Baby Boomers, entre 1946 y 1964; la ’X’, entre 1965 y 1981; la ’Y’ o Millennials, entre 1982 y 1994; la ’Z’ o Centennials, entre 1995 y 2009 y la Alfa, corresponde a los nacidos entre los primeros años de la década de 2010 y mediados de la década de 2020.
También esta clasificación varía según las características sociales de cada nación, Por ejemplo, en Estados Unidos los Baby Boomers nacieron entre 1946 y 1964, cuando algunas naciones registraron experimentaron un repunte de las tasas de natalidad tras la Segunda Guerra Mundial. Pero en España fue diferente, ya que esa categoría llegó en 1957 y hasta 1977, cuando nacieron catorce millones de bebés, según el Instituto Nacional de Estadística.
Es decir, es la misma clasificación pero con diferente coyuntura política, contexto social y años de corte. Por el contrario, la generación con más características comunes entre países son los Millennials, debido al efecto de la globalización porque su principal característica son las redes sociales, que cubren a todo el planeta.
Ahora ya se habla de la generación Beta, la cual comprendería a los nacidos desde 2025 hasta 2039, son los hijos de los Millennials y los mayores de la Generación Z. Se espera que redefinan el futuro en un mundo donde la tecnología y la sostenibilidad son protagonistas, con el potencial de modificar cómo vivimos y nos relacionamos.
Para los Beta, la integración entre los mundos digital y físico será casi imperceptible –a diferencia de los Alfa, quienes crecieron con la tecnología inteligente–, se desarrollarán en un contexto donde la inteligencia artificial (IA) y la automatización ya serán una constante en su vida cotidiana, lo cual repercutirá en la educación, atención médica, entretenimiento, además para ellos la tecnología no será un lujo, sino una extensión natural de sus vidas.
Los rasgos más distintivos que se esperan de la generación Beta serán la transición hacia un mundo más multicultural y diverso, para buscar un equilibrio entre estar siempre conectados y preservar su individualidad. En un mundo de interacciones digitales constantes, será crucial que desarrollen identidades seguras tanto en línea como en la vida real. Para ellos valores como curiosidad, inclusión y aceptación social serán esenciales en su formación, alentados por un entorno que abraza cada vez más la diversidad.
Respecto a los retos globales que definirán su crecimiento, enfrentará desafíos globales significativos, incluidos los efectos del cambio climático y la sostenibilidad poblacional. Si bien una mayoría significativa de Millennials y miembros de la Generación Z considera que el cambio climático debe ser una prioridad global, este compromiso será transmitido a la generación Beta, incentivando soluciones innovadoras para un mundo más sostenible.
También crecerán en un entorno donde los conflictos geopolíticos, desigualdades económicas y crisis de recursos serán temas centrales, factores combinados con la acelerada urbanización y la necesidad de adaptarse a entornos laborales altamente automatizados, se les exigirá que desarrollen habilidades resilientes y enfoques colaborativos para resolver problemas. Su educación y capacitación continua serán fundamentales para empoderarlos frente a estos retos globales.
Por último, cuando la generación Beta alcance la adultez, los cambios demográficos globales serán notorios: la disminución de las tasas de natalidad y el aumento en la esperanza de vida cambiarán el enfoque de los debates sociales de la superpoblación hacia la sostenibilidad de las comunidades. Ante ello, la siguiente generación posterior a la Beta, la que sería la generación Gamma, para quienes nazcan entre 2040 y 2054, comprender sus valores, necesidades y preferencias resultará esencial para anticipar cómo moldearán el futuro.
En síntesis, la generación Beta no sólo hereda un mundo complejo, también armas tecnológicas avanzadas para enfrentarlo por lo que con una base sólida en valores de inclusión y sostenibilidad, tendrá el potencial de liderar un cambio transformador que trascienda siglos.
Entonces quienes pertenecemos a las generaciones anteriores debemos estar preparados no solo para comprender, también para alentar y apoyar a quienes formarán parte de la Beta a fin de que entre todos podamos tener un mundo mejor.