La indignación ciudadana crece en redes sociales tras las devastadoras inundaciones que han dejado decenas de muertos, cientos de desaparecidos y miles de damnificados en el estado de Veracruz. En medio del caos, usuarios de distintas plataformas han comenzado a convocar firmas digitales para exigir la destitución de la gobernadora Rocío Nahle, a quien acusan de incapacidad de reacción y opacidad informativa.
Las imágenes que circulan muestran comunidades enteras bajo el agua, caminos destruidos y familias que lo han perdido todo. En contraste, los testimonios denuncian que el gobierno estatal ha sido lento, ineficaz y evasivo ante la emergencia. ’La gobernadora intenta tapar la realidad’, señalan publicaciones virales que han convertido la exigencia de renuncia en tendencia nacional.
Durante la visita de la presidenta Claudia Sheinbaum a Poza Rica, estudiantes universitarios la confrontaron con gritos y fotografías de compañeros desaparecidos. La Universidad Veracruzana reporta un censo en curso, pero los estudiantes afirman que más de 190 jóvenes de Ciencias de la Salud siguen sin ser localizados, muchos de ellos foráneos que rentaban en zonas bajas afectadas por el desbordamiento del río Cazones.
La frase ’El pueblo pone y el pueblo quita’, pronunciada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, ha sido retomada por ciudadanos como consigna para exigir la salida de Nahle. Aunque no existe hasta ahora una solicitud formal en el Congreso local, el descontento social se ha convertido en una presión política creciente.
Para el próximo 17 de octubre, se ha convocado una megamarcha en seis ciudades del estado bajo el lema ’Nuestros compañeros no son un número más’, en demanda de transparencia total y apoyo real a las familias afectadas.
Mientras tanto, la gobernadora no ha emitido una postura directa sobre las exigencias de renuncia. La presidenta Sheinbaum aseguró que no se ocultará información y que la Fiscalía hará públicos los registros de personas fallecidas y no localizadas. Sin embargo, las familias siguen buscando por cuenta propia, y el silencio oficial solo alimenta la desesperación.