Puebla enfrenta un aumento preocupante de casos de virus Coxsackie, también conocido como enfermedad de manos, pies y boca. Autoridades sanitarias han confirmado más de 200 contagios en menores de edad, especialmente en centros escolares y guarderías.
Este virus se transmite por contacto directo con superficies contaminadas, saliva o heces, y afecta principalmente a niños pequeños. Los síntomas incluyen fiebre, dolor de garganta, llagas en la boca y erupciones en manos y pies.
’Los niños se llevan las manos sucias a la boca, se contagian al tocar objetos contaminados y desarrollan granos y llagas’, explican especialistas del sector salud.
La Secretaría de Salud exhorta a padres, docentes y cuidadores a reforzar medidas de higiene: lavado frecuente de manos, desinfección de juguetes y superficies, y evitar el contacto con personas enfermas.
La prevención está en nuestras manos. Ante cualquier síntoma, se recomienda acudir al médico y evitar la automedicación.