Maullidos Urbanos
Gato de Barrio
Tanto los funcionarios como los líderes de Morena han machacado que en sus diferentes actividades y funciones así como sus programas y actividades no las deciden ellos, sino que es el pueblo quien manda y ellos obedecen lo que les señalan.
Pues bien, en el municipio de Tultitlán está a prueba esa política, ya que vecinos de la recién rebautizada colonia Cuarta Transformación, han expresado su rechazó tanto a ese nombre como a las nuevas nomenclaturas de 46 calles, la cuales ahora llevan nombres de las frases y acciones más conocidas del expresidente Andrés Manuel López Obrador.
Así de haberse conocido las colonias Fimesa I y Lomas del Parque Segunda Sección ahora fueron fusionadas y renombradas como "La Cuarta Transformación", mientras sus calles que tenían nombres de flores y frutas ahora se llaman ’Acúsalos con su mamá’, ’Abrazos, no balazos’, ’Reforma Judicial’, ’Tren Maya’, ’Tianguis del Bienestar’, ’El Insurgente’, ’Aeropuerto Tulum’ y ’Pensión Discapacidad’, ’Me canso ganso’, ’Lo que diga mi dedito’, entre otras.
Sin embargo, esas modificaciones nunca fueron consultadas con los colonos, quienes están en contra de los cambios e, incluso, han iniciado acciones legales para cancelarlos, aunque como medida de presión las autoridades de Tultitlán han determinado que no podrán pagar agua y predial hasta que no acepten los nuevos nombres de las calles.
Por tal razón este miércoles los vecinos decidieron adoptar medidas más radicales, como retirar las placas y derribar los postes tubulares de las esquinas con la nueva nomenclatura de las paredes, hechos que no pudieron ser impedidos por elementos policiacos municipales quienes prefirieron quedarse al margen. Además, anticiparon que de no ser atendidas sus demandas hasta podrían bloquear la autopista México-Querétaro.
Así, mientras la presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que esta fue una decisión del gobierno municipal de Tultitlán –aunque dijo ’es mejor poner nombres que recuperen la memoria historia de México’–, el gobierno del Estado de México se ha mantenido al margen.
El cambio de nombres fue una decisión –por no decir ocurrencia–, de la exalcaldesa Elena García –hoy diputada local–, y ratificada por su sucesora Ana María Castro Fernández, ambas morenistas, al igual que la presidenta de la república y la gobernadora mexiquense.
Así todas las autoridades involucradas son de Morena, actual partido mayoritario, por lo tanto no debe existir ningún impedimento político o ideológico para que acepten el rechazo popular, cancelen el cambio de nomenclatura de colonias y calles y ’obedezcan al pueblo’.
