Vecinos de medio centenar de colonias aledañas al parque San Rafael (Oriente de Guadalajara), se dicen "burlados" e inconformes debido a que los trabajos de "desmonte" y tala de árboles, continúa llevándose a cabo pese a contar con impedimentos legales.
Al tiempo se han talado 120 árboles –en un solo día- pero el número podría llegar a los 700 talados. ’No se debe de talar ningún árbol dentro del predio del parque San Rafael, que estas obras no se deben de hacer y las están realizando a la fuerza, ahora sí que por sus calzones y sus caprichos porque tienen compromisos políticos muy pesados con los inmobiliarios, con la mafia inmobiliaria y a pesar de que fueron notificados’, indicó Gabriela Cervantes Flores, líder de los vecinos inconformes.
Y es que, a pesar de contar con una suspensión judicial, autoridades gubernamentales de Guadalajara y el Estado de Jalisco, por medio del Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA), siguen con la edificación de un colector pluvial de 4 mil metros cuadrados en una zona verde, del parque San Rafael, al oriente de la capital jalisciense.
Los vecinos, aseguran que la defensa legal seguirá, por lo que niegan que se hayan desistido en el intento de frenar este ecocidio. Aún esperan la respuesta del tribunal colegiado.
Cabe señalar, que en días recientes, la Jueza Aída Alférez Flores, del Juzgado segundo de Distrito en Materia Administrativa y del Trabajo, negó la suspensión definitiva en dicho tema, argumentando que estas obras de edificación del colector pluvial tienen mayor impacto en beneficio de la ciudadanía, que la preservación de las áreas arboladas que ahí están destruyendo.
Cervantes Flores, denunció a demás que esa comuna los ha ignorado al momento de proponer cambios al proyecto original de esa obra, que busca proteger algunas viviendas que podrían verse afectadas en su estructura. Asimismo, dio a conocer que se les ha negado también, el nombre de la empresa a la que se le asignaron estos trabajos ’por que buscamos a quién reclamar los daños que les están causando a las viviendas, porque además este vaso regulador ha dejado inundaciones en la zona’.
Por cierto, este martes, los afectados por estas labores acudieron al Congreso Local a solicitar el apoyo de los diputados en su afán de prevenir que se concrete este receptor pluvial. Con credenciales de elector en mano, demostraron que viven en esa parte de la ciudad, con la finalidad de legitimar su movimiento.
Estos trabajos, se reanudaron el pasado jueves, luego de estar en pausa durante cinco años, lamentablemente, como una medida represiva e intimidante, las autoridades asignaron elementos de seguridad pública (antimotines) para frenar la presencia de testigos en el lugar, aunado a que todo el perímetro de esta parte del parque, no solamente luce cercada con madera, plástico negros y vallas metálicas.
